El dinero moreno del verano y otras estaciones
En la última campaña de la declaración de la renta la Administración Tributaria ha incluido en los datos fiscales de numerosos contribuyentes que conoce de la existencia de inmuebles que o bien están arrendados o que están ofertados para su alquiler. Aviso para navegantes, y es que, siguiendo con los términos marinos, el fisco cada vez bucea más en las redes sociales y demás páginas que curiosea todo hijo de vecino, con lo que está haciendo cábalas de posibles hechos imponibles que puedan suponer una renta para el titular del anuncio y que tiene serias dudas de que estén siendo sometidas a tributación. No debemos sorprendernos de estas prácticas, ya que como sabemos, cada día la AEAT está más avanzada en el campo informático. Dicen que solo tenemos por delante al IRS, los americanos.
Recordamos que no es el debut atacando a los pueblos cercanos a la playa en estas épocas y cotejando si los dineritos que se lleva al bolsillo el arrendatario tiene su reflejo, negro sobre blanco (nunca mejor dicho), en los datos que maneja Hacienda año tras año a la hora de afinar el disparo al corazón tributario el contribuyente.
En este sentido, los funcionarios, conocedores de tales hechos, han optado por avisar previamente a los posibles caraduras arrendadores de las sanciones que van aparejadas a la no declaración de las rentas sujetas al Impuesto sobre la Renta de las Personas Físicas, como medida antifraude, y que, entendemos, resulta procedente a todos los niveles.
Estas labores de investigación, no sólo se circunscriben al arrendamiento a través de páginas web, como puede ser Airnbnb, sino que éstas van más allá y utilizan otras aplicaciones y rastrean, cual Rastreator otras como puede ser Cabify.
Para curarse en salud, en la web de Airbnb ya podemos encontrar un manual sobre cómo tributan los arrendamientos de inmuebles, sean ofertados a través de páginas web, a través de inmobiliarias o sin oferta previa, ya que todos ellos se someten por igual a las reglas contenidas en ley reguladora del Impuesto sobre la Renta de las Personas Físicas.
Estas medidas adoptadas por las Agencia tributaria y que pueden resultar novedosas, se enmarcan dentro de un Plan de lucha contra el fraude fiscal, que cada año parece ser más rentable midiendo esfuerzo y resultados. Bueno, pues ya lo sabemos, todos a declarar.